En nuestro proceso de búsqueda de empleo debemos evaluar de forma periódica los resultados obtenidos de las acciones que vamos ejecutando para seguir mejorando. No olvidemos que lo que no se evalúa no se puede perfeccionar.
En muchas ocasiones, las personas que se encuentran en proceso de búsqueda de trabajo afirman de forma categórica “esta herramienta no sirve para nada” y en más de una ocasión no se ha dedicado tiempo a darle una oportunidad a esa aplicación.
Vamos a poner un ejemplo. Cada vez están más extendidas en su uso las redes profesionales para buscar oportunidades laborales. La red más conocida y usada es Linkedin. Determinadas personas sin conocerla ya la juzgan y dicen que no sirve para nada. Antes de hacer estos juicios categóricos deberíamos plantearnos las siguientes preguntas: ¿Cuánto tiempo habéis dedicado para conocer linkedin? ¿Tenéis claro para que os puede servir? ¿Habéis plasmado los objetivos que pretendéis alcanzar en ella? ¿Habéis seguido los pasos adecuados para sacarle partido? ¿Habéis observado qué hacen las personas que la usan adecuadamente? Con esto lo que pretendemos es hacer ver que debemos evaluar nuestro comportamiento y acciones con cada herramienta.
Está claro que determinadas aplicaciones o herramientas no os servirán para vuestro proceso de búsqueda porque no encajan con vuestros parámetros, sin embargo, le habéis dado una oportunidad y esto requiere invertir tiempo para investigar, probar e interactuar, debéis de pensar que “cuanto más siembres más recogerás… pero siembra en aquel campo donde la tierra sea fértil” Debéis haceros la composición de lugar por vosotros mismos y no por lo que otros os cuenten.
Las cosas tienen múltiples formas de hacerse porque no existe una única forma correcta de hacer las cosas. Va bien el buscar nuevas formas de ejecutar nuestras acciones dentro de nuestro proceso de búsqueda.
Os recomendamos que desmontéis vuestras acciones dentro del proceso de búsqueda en pequeños pasos para analizarlos uno por uno y ver cual se puede suprimir o mejorar. Pongamos un ejemplo. Vamos a coger el proceso de enviar nuestra candidatura a una oferta de trabajo de nuestro perfil. Las acciones adecuadas de este proceso serían: analizar cada oferta para ver si encaja con nuestro perfil profesional, adaptar vuestro CV para cada oferta concreta, hacer llegar vuestra candidatura por la vía adecuada, investigar la organización a la que mandáis vuestro perfil para obtener el máximo de información. Ahora en caso de que no sigáis este proceso deberíais ver los resultados que obtenéis y sino probar a introducir alguno de los pasos no efectuados. Esta claro que la fórmula mágica no existe, sin embargo, siempre existen acciones más efectivas que otras.
Vuestro proceso de búsqueda de empleo debe ser lo más efectivo posible y eso supone analizar el mismo para conseguir la máxima efectividad de cara a lograr volver al mercado laboral lo antes posible.
Pingback: La evaluación en el proceso de búsqueda de empleo | EMPLEO SIN FRONTERAS